La Cabria, nº 106

HOJA PARROQUIAL DE SAN JOSÉ
DE LINARES
27º DOM. t. o. C
3 DE OCTUBRE. del 2010
Año -II- Nº 106

EDITORIAL

¿QUIÉNES SON RESPONSABLES
DE LA CATEQUESIS?
La doctrina de la Iglesia indica que son los padres los educadores religiosos primarios de sus hijos, los primeros e insustituibles catequistas. La tarea de la educación en la fe es de los padres. La Iglesia, el colegio, la comunidad parroquial les ayudan y completa su formación.
Esta responsabilidad la asumieron los padres primero en el matrimonio y después la ratificaron cuando presentaron a sus hijos para que fuesen bautizados.
Sin embargo, la educación religiosa y la transmisión de la fe se encuentran dentro de un ambiente de secularismo que no favorece la dimensión religiosa de la persona humana, sino que prescinde de ella, la desvaloriza e incluso la combate. Esto hace que la transmisión de la fe en la familia tenga que hacerse de manera distinta a como lo hicieron generaciones anteriores:
1. La fe se acepta libremente y no puede imponerse a nadie, es un don, pero necesita de unas vivencias y experiencias vividas en familia y de un acompañamiento.
2. Es esencial el ejemplo y el testimonio de fe de los padres.
3. Es necesario consolidar una formación cristiana en los hijos.
4. Los padres tienen que acompañar a sus hijos en su itinerario de fe, esto es, en las distintas etapas catequéticas parroquiales.
Os dejamos algunas cuestiones para que reflexionéis en familia sobre todo esto que hemos expuesto:
- ¿Como padres, a qué nivel de preocupación os encontráis en el tema de la educación en la fe de vuestros hijos?
- ¿Es tema frecuente de diálogo y reflexión entre la pareja?
-¿Sois testigos creíbles de la experiencia de Dios en el seno de la familia? ¿Os preocupa vuestro ejemplo?
- ¿Qué dificultades concretas encontráis en la transmisión de la fe?
- ¿Cooperáis activamente con la parroquia en la preparación de la catequesis de vuestros hijos?
Nuestra parroquia organiza las catequesis para los padres para ayudaros en esta tarea tan importante. Os animamos asistir.


PALABRA DE DIOS

Lectura del libro del profeta HABACUC: 1,2-3, 2,2-4
¿Hasta cuándo clamaré Señor, sin que me escuches?
¿Te gritaré «Violencia», sin que me salves?
¿Por qué me haces ver desgracias, me muestras trabajos, violencias y catástrofes, surgen luchas, se alzan contiendas?
El Señor me respondió así: Escribe la visión, grábala en tablillas, de modo que se lea de corrido. La visión espera su momento, se acerca su término y no fallará; si tarda, espera, porque ha de llegar sin retrasarse. El injusto tiene el alma hinchada, pero el justo vivirá por su fe.
Palabra de Dios

Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 1,6-8. 13-14.
Querido hermano:
Aviva el fuego de la gracia de Dios que recibiste cuando te impuse las manos; porque Dios no nos ha dado un espíritu cobarde, sino un espíritu de energía, amor y buen juicio. No tengas miedo de dar la cara por nuestro Señor y por mí, su prisionero. Toma parte en los duros trabajos del evangelio, según las fuerzas que Dios te dé. Ten delante la visión que yo te di con mis palabras sensatas, y vive con fe y amor cristiano. Guarda este tesoro con la ayuda del Espíritu Santo, que habita en nosotros.
Palabra de Dios

Lectura del santo evangelio según san Lucas 17,5-10.
En aquel tiempo, los apóstoles dijeron al Señor: Auméntanos la fe.
El Señor contestó: Si tuvierais fe como un granito de mostaza, diríais a esa morera: «Arráncate de raíz y plántate en el mar», y os obedecería.
Suponed que un criado vuestro trabaja como labrador o como pastor; cuando vuelve del campo, ¿quién de vosotros le dice: «En seguida, ven y ponte a la mesa”?.
¿No le diréis: «Prepárame de cenar, cíñete y sírveme mientras como y bebo; y después comerás y beberás tú»? ¿Tenéis que estar agradecidos al criado porque ha hecho lo mandado? Lo mismo vosotros: cuando hayáis hecho todo lo mandado, decid: “Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer”.
Palabra del Señor


DIÁLOGOS DESDE EL EVANGELIO

N: Amigo y Maestro Jesús: Creo no equivocarme si te digo que la petición que te hicieron tus apóstoles “auméntanos la fe” es válida para todos nosotros. Nos descolocan, a veces, los cambios que se operan en esta sociedad, de la que formamos parte. Son cambios profundos y rápidos, pero, además hay una tendencia, secundada ampliamente por los medios de comunicación social, a presentar lo religioso como algo trasnochado, propio de personas y grupos reacios al progreso.
*Jesús: Llevas razón, amigo. Debido a eso hay bastantes cristianos que lo están pasando mal, al ver cómo se desmoronan sus esquemas religiosos, sus formas de vivir sus prácticas de piedad y sus ancestrales costumbres religiosas. Otros están desorientados y desalentados cuando ven que sus hijos han hecho caso omiso del bagaje religioso recibido en la familia.
N: Pero, además, querido amigo Jesús, muchos nos sentimos culpables y como fracasados por no haber sido diligentes, tanto en la transmisión y la vivencia del mensaje cristiano, como en la correlación entre fe y vida y podemos ser víctimas de la tendencia a relegar la vida religiosa a la zona de lo privado, sin ser capaces de ser tus testigos en medio de nuestro mundo.
*Jesús: Bueno, pero no te puedes quedar ahí. El pesimismo y el miedo no son buenos compañeros de viaje. Te invito a que recuerdes mis palabras: “No temáis, yo he vencido al mundo.”(J. 16,33). “El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán. (Mt. 24,35) “Yo estaré con vosotros todos los días…”(Mt. 28,30). “Vosotros seréis mis testigos…”(Hech. 1,8)
N: Ay, Señor, qué olvidadizos y qué tardos somos para creer. Hoy es preciso decirte: “auméntanos la fe”.Necesitamos ser creyentes convencidos; creyentes de corazón, sin miedo a dar la cara por Ti. Una fe que sea para nosotros, no solo un conjunto de verdades o de prácticas religiosas, sino un estilo de vida, una forma de vivir de cara a Dios y de cara a los hermanos; una fe que se sitúa en el ámbito de las vivencias y valores personales como el amor, la amistad, la alegría, la esperanza, y el miedo.
*Jesús: Muy bien, amigo. Esa es la fe que yo deseo para vosotros; esos son los creyentes que necesita nuestro mundo; una fe que se vive como don gratuito del Padre y, por consiguiente, vivida con agradecimiento, con sencillez, sin considerarse como acreedores y merecedores de recompensa.
N: Qué bien, Maestro y compa-ñero de camino. Ahora entiendo eso que dices; “cuando hayáis hecho todo lo mandado, decid: somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer”. Aunque a muchos no suene bien la palabra, la digo: hace falta la humildad.
Y termino, querido Jesús: AUMENTANOS LA FE.


VE Y LO CUENTAS

Adiós, ROQUE:
Noventa y cinco años de tiempo no habían podido mermar tu sentido del humor, ni tus ganas de vivir. Te recuerdo en el centro del corrillo, transmitiendo en amena conversación las anécdotas acumuladas a lo largo de una vida dura. Siempre presto para aceptar la invitación de un brazo que te llevaba a cualquier parte. Con una agudeza en los sentidos que no nos podíamos explicar. Atento a cuanto pasaba y apreciando y admirando, sin disimulos, los dones con que la naturaleza adorna a la mujer. Directo, inteligente y simpático, conseguiste en un periodo corto de tiempo ser querido por cuantos te conocieron. Y a tu vez, supiste apreciar las deferencias recibidas y guardaste en un lugar preferente de tu corazón un bagaje de cariño por nuestra comunidad.
Dos días antes de partir, estando en el hospital, recordabas, como un tiempo muy especial, los meses que compartimos y nos hiciste un encargo: transmitir a cada una de las personas que conociste en la parroquia (y nos fuiste nombrando una a una) tu recuerdo y tu cariño. Más de una hora de animada charla y no diste la menor muestra de cansancio. ¡Qué naturaleza la tuya! Nos negamos a creer lo que transmitían los médicos.
Hoy has pasado el umbral, y nosotros, sintiendo enormemente tu marcha, rezamos para que Dios te conceda, junto a tu mujer, la vida nueva y plena que nos ganó Jesucristo.
De parte de todos, un abrazo entrañable. ¡Hasta siempre, amigo!


EN ESTA SEMANA

•El día 3 en misa de 12 haremos el ENVIO de los catequistas para que sigan al lado de los padres ayudando en el cultivo de la fe de los niños.
•Comienzo de todos los cursos de catequesis en sus respectivos días de 6 a 7 de la tarde.
•Día 4, 6 p.m.: Reunión padres 2º curso
•Día 5, 6 p.m.: Reunión padres 4º. curso.
•Día 6, 6 p.m.: Reunión padres 3er curso
•Día 7, 6 p.m.: Reunión padres 1er. curso.
•Día 9, 5 p.m.: Reunión y merienda con las familias y niños de preparación para la Confirmación (cursos 5º,6º, ESO)
•Día 5, a las 8,30 p.m.: Nuestra parroquia celebra la novena a la Virgen de Linarejos en San Francisco.
A las 8 p.m. realizaremos el rezo del Rosario. La misa de la tarde la tendremos por tanto en San Francisco a las 8,30 de la tarde.
¡ESPERAMOS REUNIRNOS TODOS EN TORNO A NUESTRA PATRONA!