La Cabria, nº 217


HOJA PARROQUIAL DE S. JOSÉ 
DE LINARES 
DOM. Resurrec. C 
31-Marzo 2013 Año V- Nº 217

Editorial

LA CELEBRACIÓN LITÚRGICA DEL SÁBADO 

Con frecuencia nos entramos en la celebración de esta noche, que vemos cargada de cosas y sentimos que algo grande se está expresando, pero no llegamos a captar todo su contenido. Invito a que los que tienen internet se metan en nuestro blog parroquial, http://parroquiasanjoselinares.blogspot.com.es/, donde pueden encontrar una explicación más amplia de todo lo que venimos haciendo. En la hoja de hoy, daremos unas pautas para que tengamos una idea de todo lo que en esta noche celebraremos. La celebración tiene cuatro partes: 

1º- Liturgia de la LUZ. Desde ayer se impone el silencio, el recogimiento, la tristeza por lo que ocurrió; la muerte se impuso a la vida, las tinieblas a la luz y todo quedó en el caos; ésta es la acción del pecado. La oscuridad de la noche representa el estado de las tinieblas que han atentado contra la luz, es la situación del pecado, de la muerte, de la traición… El montón de leña representa el sepulcro en el que Cristo estuvo enterrado y del que salió vencedor de la oscuridad de la muerte, como una explosión de luz. Lo representamos en el CIRIO PASCUAL del que vamos prendiendo cada uno nuestra luz (cada uno se llevará esa noche su vela, recordando la luz que se encendió el día de su bautismo, significando la fe en la que quedábamos incorporados: Cristo Resucitado) 

A continuación se hace una proclamación del PREGÓN PASCUAL, que será como un recuerdo del mandato que recibieron las mujeres de ir y anunciar a los apóstoles que Cristo había resucitado. Hoy es la Iglesia la que recibe este encargo de ir a todo el mundo y anunciar que Cristo ha resucitado y que con su resurrección ha vencido a la muerte y al pecado. 

2ª- La liturgia de la Palabra. Se proponen 9 lecturas, siete del antiguo Testamento y dos del Nuevo (Rm.6,3-11 y el Evangelio de S. Lucas 21,1-12) en las que se va haciendo un recorrido desde el mismo comienzo de la creación, pasando por los profetas, de toda la intervención que Dios ha tenido en la historia, siendo fiel a su palabra. 

3ª- Liturgia Bautismal. Es un momento entrañable en el que recordamos nuestro propio bautismo, en el que renovamos aquel compromiso contraído y aquella confesión de fe que hicieron nuestros padres y padrinos en nuestro nombre, que después hemos hecho nuestra 4ª- Liturgia Eucarística, que continúa ya el ritmo normal de la Eucaristía que celebramos como cumbre de toda la vida cristiana.

Palabra de Dios

Lectura de los Hechos de los Apóstoles. Hch 10,14a.37-43. 

En aquellos días, Pedro tomó la palabra y dijo: -Hermanos: Vosotros conocéis lo que sucedió en el país de los judíos, cuando Juan predicaba el bautismo, aunque la cosa empezó en Galilea. Me refiero a Jesús de Nazaret, ungido por Dios con la fuerza del Espíritu Santo, que pasó haciendo el bien y curando a los oprimidos por el diablo; porque Dios estaba con él. 

Nosotros somos testigos de todo lo que hizo en Judea y en Jerusalén. Lo mataron colgándolo de un madero. Pero Dios lo resucitó al tercer día y nos lo hizo ver, no a todo el pueblo, sino a los testigos que él había designado: a nosotros, que hemos comido y bebido con él después de su resurrección. 

Nos encargó predicar al pueblo, dando solemne testimonio de que Dios lo ha nombrado juez de vivos y muertos. El testimonio de los profetas es unánime: que los que creen en él reciben, por su nombre, el perdón de los pecados. 

Lectura de la carta del apóstol S. Pablo a los Colosenses. Col. 3,1-4 

Hermanos: Ya que habéis resucitado con Cristo, buscad los bienes de allá arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios; aspirad a los bienes de arriba, no a los de la tierra. Porque habéis muerto, y vuestra vida está con Cristo escondida en Dios. Cuando aparezca Cristo, vida nuestra, entonces también vosotros apareceréis, juntamente con él, en gloria. 

Lectura del santo Evangelio según San Juan. Jn 20,1-9. 

El primer día de la semana, María Magdalena fue al sepulcro al amanecer, cuando aún estaba oscuro, y vio la losa quitada del sepulcro. Echó a correr y fue donde estaba Simón Pedro y el otro discípulo a quien quería Jesús, y les dijo: -Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto. Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro. Los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corría más que Pedro; se adelantó y llegó primero al sepulcro; y, asomándose, vio las vendas en el suelo; pero no entró. Llegó también Simón Pedro detrás de él y entró en el sepulcro. Vio las vendas en el suelo y el sudario con que le habían cubierto la cabeza, no por el suelo con las vendas, sino enrollado en un sitio aparte. Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro; vio y creyó. Pues hasta entonces no habían entendido la Escritura: que él había de resucitar de entre los muertos.

Hacia Dios por los caminos de la Biblia, nº 66

En el encinar de Mambré (b). La hospitalidad es un acto de amor. 

Christian: (Cristiano o seguidor de Cristo): Recuerda, amigo Abraham, que el día pasado terminabamos diciendo que “somos huéspedes de Dios”. 

Se expresa con realismo el Salmo 23, que nos dice: “me guía por los senderos de justicia; aunque vaya por cañadas oscuras, nada temo, porque tú vas conmigo, tu voz y tu cayado me sostiene Me preparas una mesa delante de mis enemigos, perfumas con un-güento mi cabeza y me llenas la copa a rebosar” 

Abraham: Qué verdad es, amigo Christian. Hay días en los que, sentado a la sombra del árbol de la puerta de la tienda, recuerdo y gozo al deslizar por mi imaginación las escenas en que he sentido la compañía, rebosante de amor, de nuestro Dios. Hasta recordaba y gozaba por la delicadeza y el buen gusto de nuestro Creador, cuando me presentaba las auroras y las puestas de sol; la aparición pacífica de la luz, que ahuyentaba las tinieblas de la noche,… Toda la creación a mi disposición… 

Christian: Tienes alma de poeta, querido amigo. Dicen que “de poetas y locos, todos tenemos un poco”. 

Abraham: Puede ser verdad, pero, al contemplar el comportamiento de Dios con nosotros, los creyentes tenemos que comportarnos con los extranjeros como Él actúa con nosotros. 

Nos dice el Señor: “Al extran-jero que habita con vosotros, en medio de vosotros, deberéis tratarlo como de vuestro pueblo, lo amarás como a ti mismo”. Lv. 19,34, 

Christian: Y hay en toda la Biblia innumerables ejemplos de hospitalidad, tantos que no es posible consignarlos en este espacio. La acogida es una de las facetas del compromiso de todo creyente y, por consiguiente, de todo cristiano. Te llamamos, querido Abraham, el Padre de todos los creyentes, por lo que nuestro comportamiento con los extranjeros debe ser como el tuyo. 

Abraham: Mi padre decía que la puerta de nuestra casa debería estar siempre semientorrnada, dispuesta siempre a recibir al emigrante. 

Christian: Buena idea y buena acción. En la calle siempre habrá pobres, necesitados de ayuda, emigrantes, extranjeros, marginados y nómadas. “Lo que hicisteis con uno de estos, conmigo lo hicísteis, dice Jesús. También nos dice: “Yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y me abre, entraré en su casa, cenaré con él y él conmigo”. Ap. 3,20

Ve y lo cuentas

Una gran alegría y un signo pascual que indica que la vida que hemos celebrado sigue palpitando, es precisamente, la presentación de los nuevos MINISTROS EXTRAORDINARIOS DE LA EUCARISTÍA, que nuestro obispo nombró el día 2 de Marzo en la catedral, para que realicen su servicio en nuestra comunidad. Ellos son: 

ESPERANZA GONZALEZ JIMÉNEZ, MARÍA JIMÉNEZ CAPARRÓS, JUAN GÁMEZ GONZÁLEZ, Hnª CARMEN CERECEDA CAÑADAS, GABRIELA RAMIREZ VALCARCEL y ROSA DÍAZ HERNÁNDEZ La comunidad pide para todos ellos la bendición del Señor y les da las gracias por su servicio, para lo que hoy son enviados.

Lo que no vende

La nueva Iglesia (familia) que nace de la resurrección de Cristo por la fuerza y la vida del Espíritu Santo, es justamente esa, la comunidad de los “carismas” (dones) que da el Señor a cada uno de sus miembros y que invita a ponerlos al servicio de la comunidad, para todo aquello que se los necesite. Esos servicios se llaman “MINISTERIOS”, por eso, cada “ministro” es un servidor de la comunidad. Lo que ocurre es que Jesús dijo que lo que se nos ha dado “gratis” debemos darlo gratis, que significa “gratuito y con agrado” y eso… hoy no “vende” en este mundo en que vivimos, donde todo se paga y todo se compra y nadie acepta tener que agradecer nada a nadie. ¡Menos mal que las cosas de Dios no se pueden comprar ni pagar! Y, el momento que en ellas entra el dinero, se fastidia todo.

En esta semana

Día 1 Reunión padres de 4º 
Día 2 Reunión padres de 2º 
Día 3 Reunión padres de 1º Día 4 Reunión padres de 3º

Feliz semana

Desde nuestra CABRIA queremos dar la bienvenida a nuestra familia cristiana a todos los niños que se han bautizado en la Vigilia Pascual, especialmente a José Manuel y a Ariadna. Queremos deciros que aquí tenéis a vuestra familia, que sintáis vuestra parroquia como vuestra casa y, a cada uno de sus miembros como uno de vuestros hermanos que os quieren.

La Cabria, nº 216

HOJA PARROQUIAL DE S. JOSÉ 
DE LINARES 
DOM. Ramos t.o. C 
24-marzo 2013 Año V- Nº 216

Editorial

DOMINGO DE RAMOS DEL PAPA FRANCISCO

En aquel tiempo el ambiente era tremendo: el pueblo estaba acabado y había perdido la confianza en todo y en todos; nadie sabía con quién se estaba tuteando, si era adepto al régimen romano o al judío, pues por ambas partes te la jugabas el tipo; hicieras lo que hicieras se te podía revolver en tu contra... 

En medio de ese ambiente Jesús entró en Jerusalén definiéndose en pro de la Verdad, de la Justicia, de la Paz y del Amor y lo consideraron revolucionario, antisistema, blasfemo, endemoniado, agitador político… 

Francisco, también tú acabas de subir a Jerusalén; empezaste diciéndole a tus hermanos cardenales que sean intachables y les dijiste: “Que Dios os perdone de lo que habéis hecho conmigo”. La verdad es que ha sido una buena faena, pero estamos todos contentos, creemos que el Espíritu nos ha hecho un gran regalo; no tengas miedo en asumir el servicio que te pide la Iglesia de este momento. Muchos lo hemos sentido como una ráfaga de viento fresco dentro de ella, aunque otros muchos ya andan rebuscando como escarabajos en las papeleras todo lo que pueda sonar a anti-sistema, blasfemo del progreso, filo-dictador… para seguir dándole cuerda al ventilador… ¿quién te sentenciará? 

¡Bienvenido, hermano Francisco! Queremos brindarte nuestras manos para reconstruir contigo la Iglesia allí donde las goteras están haciendo que se cuele el relativismo moral, el subjetivismo y el permisivismo que nos invita al “todo vale”. Queremos contigo recuperar el espíritu de libertad que da la pobreza evangélica, que nos hace estar al lado de los más débiles y desprotegidos y despojarnos del polvo que el camino de la historia ha ido posándose en las estructuras eclesiales, para poder presentar un rostro limpio y claro del que dio su vida en la cruz para traernos la salvación.

Palabra de Dios

Lectura del libro de Isaías. 

El mismo Señor me ha dado una lengua de discípulo, para que yo sepa reconfortar al fatigado con una palabra de aliento. Cada mañana, él despierta mi oído para que yo escuche como un discípulo. El Señor abrió mi oído y yo no me resistí ni me volví atrás. Ofrecí mi espalda a los que me golpeaban y mis mejillas, a los que me arrancaban la barba; no retiré mi rostro cuando me ultrajaban y escupían. Pero el Señor viene en mi ayuda: por eso, no quedé confundido; por eso, endurecí mi rostro como el pedernal, y sé muy bien que no seré defraudado. 

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Filipos. 

Jesucristo, que era de condición divina, no consideró esta igualdad con Dios como algo que debía guardar celosamente: al contrario, se anonadó a sí mismo, tomando la condición de servidor y haciéndose semejante a los hombres. Y presentándose con aspecto humano, se humilló hasta aceptar por obediencia la muerte y muerte de cruz. Por eso, Dios lo exaltó y le dio el Nombre que está sobre todo nombre, para que al nombre de Jesús, se doble toda rodilla en el cielo, en la tierra y en los abismos, y toda lengua proclame para gloria de Dios Padre: «Jesucristo es el Señor». 

Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas. 

Jesús siguió adelante, subiendo a Jerusalén. Cuando se acercó a Betfagé y Betania, al pie del monte llamado de los Olivos, envió a dos de sus discípulos, diciéndoles: “Vayan al pueblo que está enfrente y, al entrar, encontrarán un asno atado, que nadie ha montado todavía. Desátenlo y tráiganlo; y si alguien les pregunta: «¿Por qué lo desatan?», respondan: «El Señor lo necesita»”. Los enviados partieron y encontraron todo como él les había dicho. Cuando desataron el asno, sus dueños les dijeron: “¿Por qué lo desatan?” Y ellos respondieron: “El Señor lo necesita”. Luego llevaron el asno adonde estaba Jesús y, poniendo sobre él sus mantos, lo hicieron montar. Mientras él avanzaba, la gente extendía sus mantos sobre el camino. Cuando Jesús se acercaba a la pendiente del monte de los Olivos, todos los discípulos, llenos de alegría, comenzaron a alabar a Dios en alta voz, por todos los milagros que habían visto. Y decían: “¡Bendito sea el Rey que viene en nombre del Señor! ¡Paz en el cielo y gloria en las alturas!”

Hacia Dios por los caminos de la Biblia, nº 65

En el encinar de Mambré. Gn. 18, 1-15. (a) 

Christian: (Cristiano o seguidor de Cristo): He leído lo de la visita que recibiste junto al encinar de Mambré. El sol se caía a pedazos, por lo que tú estabas sentado a la sombra ante la puerta de tu tienda. 

Abraham: Así pasaba buenos ratos, cuando se aproximaba la hora de la comida e igualmente después de comer. Tenía dos árboles muy frondosos y, como había muchas encinas, de vez en cuando me regalaban una brisa, que me acariciaba y refrescaba mi sudoroso rostro 

Christian: Y recibiste nada menos que la visita del Señor. Sí, eran tres hombres, pero, en realidad, la fe te llevó a intuir que aquellos tres visitantes eran el mismo Dios. 

Abraham: Es cierto, amigo Cristian. Nada más verlos el corazón me dio como un salto, me puse en pie, corrí a su encuentro, me postré en tierra y llevado por una fuerza interior, dije: “Mi Señor, por favor; si he hallado gracia a tus ojos, no pases sin detenerte con tu siervo”. 

Christian: y se detuvo (se detuvieron) y tú diste ejemplo de tu capacidad de acogida: les ofreciste agua, y les pusiste de comer, y fuiste de prisa en busca de Sara para que hiciera el pan, y mandaste matar un becerro tierno y cebado y, sentados a la sombra del árbol, comieron, mientras tú permanecías de pie junto a ellos. Todo un ejemplo de hospitalidad. 

Abraham: Hice lo que tenía que hacer. La hospitalidad es algo que pertenece a la misma esencia de mi familia. En nuestros largos viajes, muchas veces hemos sido recibidos y tratados como yo he atendido a estos tres desconocidos, a quienes yo tomé por mi Señor. 

Christian: Hace tiempo que leí en un libro que todos somos huéspedes de Dios. Él nos ha acogido en este gran palacio del mundo: ha puesto a nuestra disposición la tierra, regada y fertilizada por inquietos y serpenteantes arroyos, que alimentan los caudalosos ríos; nos ha dado los árboles frutales, los animales, las hortalizas, el aire que respiramos, el sol, la luna y las estrellas…Tantas cosas… Pero, amigo Abraham, seguiremos el próximo día.

Horarios para la Semana Santa

Día 24. DOMINGO DE RAMOS: 
-9’00. Misa y Bendición de los Ramos 
-10’00. Procesión. 
-12’00. Santa Misa. 
-19’00. Santa Misa. 

Día 25. LUNES SANTO: 
- Por la mañana, visita a los enfermos. 
-19’00. Eucaristía. 
-19’30. Oración en torno a la Pasión. 

Día 26. MARTES SANTO: 
-11’00. Misa Crismal en la Catedral 
-19’00. Eucaristía. 
-19’30. Oración en torno a la Pasión 

Día 27. MIÉRCOLES SANTO: 
- Por la mañana, visita a los enfermos. 
-19’00: Procesión de Jesús de la Buena Muerte. 
-19’30. Oración en torno a la Pasión en casa de las Hermanas. 

Día 28. JUEVES SANTO: 
-19’00. Cena del Señor. 
-23’00. Hora Santa. 

Día 29. VIERNES SANTO: 
-11’00. Vía Crucis de los enfermos. 
-16’00. Adoración de la Cruz. 
-19’00. Oración en torno a la Pasión. 

Día 30. SÁBADO SANTO: 
-23’00. Solemne Vigilia Pascual. 

Día 31. DOMINGO DE PASCUA: 
-10’00. Eucaristía 12’00. Eucaristía.

Lo que no vende

La figura de Jesús entusiasmó mientras lo escuchaban y lo veían enfrentarse con los fariseos y los maestros de la ley, hasta el momento en que empezó a decir que había que implicarse y no quedarse como un mirón, sino protagonista del cambio. Ahí empezaron a mirarlo de otra manera. Es muy posible que nos entusiasmemos viendo el aire fresco que supone la figura del Papa hasta que nos pida que tomemos posiciones concretas... 

En esta semana 

La semana de Pascua es la más importante de todas las celebraciones del año; en ella vivimos concentrado todo el misterio de la vida cristiana. 

Invitamos a celebrarla entera: pasión, muerte y resurrección. Una muerte que se queda en el sepulcro es un fracaso y una resurrección que no pasa por la muerte es una quimera, una ilusión. 

¡¡¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!!!

La Cabria, nº 215


HOJA PARROQUIAL DE S. JOSÉ 
DE LINARES 
DOM. 5º CUARESMA. C 
17 DE MARZO 2013 Año V- Nº 215

Editorial

EL PRIMER ELEGIDO

En plena efervescencia ante la elección de nuestro nuevo Papa, se nos ocurre preguntarnos: ¿Qué vería Jesús en Pedro? 

Porque Pedro no era el más erudito de los apóstoles. Fue un trabajador del mar, de clase humilde, sensible a la injusticia y rebelde frente a la opresión. De fuerte personalidad, impulsivo y franco. Empatizó muy pronto con Jesús, lo acogió en su casa y lo siguió a todas partes. 

El Evangelio relata su presencia en los momentos más extraordinarios. Tuvo fallos, pero también el valor de reconocerlos, arrepentirse y cambiar. Escuchó de labios de su amigo y maestro las palabras más duras: “Apártate de mí, Satanás…”, y recibió de él la más alta misión. En un momento de debilidad lo negó tres veces y tres veces le afirmó su amor y su adhesión. Como el resto de sus compañeros, no comprendió del todo a Jesús hasta después de la resurrección. 

A partir de ahí se transformó. El Espíritu hizo fructificar abundantemente la experiencia vivida junto a él y el profundo sentido de su vida y su mensaje; iluminando además todo lo que conocía del Antiguo Testamento. Sus Cartas son un reflejo fiel de esta evolución. 

No defraudó la confianza que el Señor puso en él. Fiel a su compromiso y coherente hasta el final, dio un valiente testimonio de cuanto había visto y oído, en aquellos tiempos difíciles en que comenzaba la andadura de la Iglesia. Murió también en la cruz, pero cabeza abajo por no considerarse digno de hacerlo como el Maestro. El encuentro íntimo con Jesús y la acción del Espíritu Santo, transformaron a un hombre como tantos otros, en una roca firme donde apoyar la Iglesia. Que el nuevo pontífice goce de ambas experiencias.

Palabra de Dios

1ª Lectura: Lectura del profeta Isaías. 43,16-21 

Así dice el Señor que abrió camino en el mar y sendas en en las aguas impetuosas; que sacó a batalla carros y caballos, tropa con sus valientes: caían para no levantarse, se apagaron como mecha que se extingue. No recordéis lo de antaño, no penséis en lo antiguo; mirad que realizo algo nuevo; ya está brotando, ¿no lo notáis? Abriré un camino por el desierto, ríos en el yermo; me glorificarán las bestias del campo, chacales y avestruces, porque ofreceré agua en el desierto, ríos en el yermo, para apagar la sed de mi pueblo, de mi escogido, el pueblo que yo formé, para que proclamara mi alabanza. 

2ª Lectura. Lectura de la carta del apóstol S. Pablo a los filipenses 3,8-14 

Hermanos: todo lo estimo pérdida, comparado con la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor. Por Él lo perdí todo y todo lo estimo basura con tal de ganar a Cristo y existir en él, no con una justicia mía -la de la ley- sino con la que viene de la fe de Cristo, la justicia que viene de Dios y se apoya en la fe. 

Para conocerlo a él, y la fuerza de su resurrección, y la comunión con sus padecimientos, muriendo su misma muerte, para llegar un día a la resurrección de los muertos. No es que ya haya conseguido el premio, o que ya esté en la meta: yo sigo corriendo. Y aunque poseo el premio, porque Cristo Jesús me lo ha entregado, hermanos, yo a mi mismo me considero como si aún no hubiera conseguido el premio. 

Solo busco una cosa: olvidándome de lo que queda atrás y lanzándome a lo que está por delante, corro hacia la meta, para ganar el premio, al que dios desde arriba llama en Cristo Jesús. 

Lectura del santo evangelio según S. Juan. 8,1-11 

En aquel tiempo Jesús se retiró al monte de los olivos. Al amanecer se presentó de nuevo en el templo y todo el pueblo acudía a él, y, sentándose, les enseñaba. Los letrados y los fariseos le traen una mujer sorprendida en adulterio y, colocándola en medio, le dijeron: “Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. La ley de Moisés nos manda apedrear a las adúlteras: tú, ¿qué dices? Le preguntaban esto para comprometerlo y poder acusarlo. Pero Jesús, inclinándose, escribía con el dedo en el suelo. 

Como insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo: “El que esté sin pecado, que tire la primera piedra” e inclinándose otra vez, siguió escribiendo. Ellos, al oírlo, se fueron escabullendo uno a uno, empezando por los más viejos, hasta el último. Y quedó solo Jesús y la mujer en medio, de pie. Jesús se incorporó y le preguntó: “Mujer, ¿donde están tus acusadores? ¿Ninguno te ha condenado? Ella contestó: Ninguno, Señor. Jesús le dijo: “Tampoco yo te condeno. Anda, y en adelante no peques más”

Hacia Dios por los caminos de la Biblia, nº 64

Alianza de Dios con Abraham 

Christian: He leído, amigo Abraham, el capítulo 15 del Génesis. (Gn. 15), y me ha encantado. Me refiero al sacrificio que ofreciste a Dios.

Abraham: Pues mira, amigo Christian: yo estuve pensando en mis planes de futuro. Tenía mis dudas y mis miedos, pero el Señor me habló, como siempre, al corazón y me dijo: "No temas, Abram, yo soy tu protector, tu recompensa será muy grande." 

Christian: ¿Y cuáles eran tus dudas? 

Abraham: La principal de todas es que Dios me prometía una gran recompensa, tierras y descendencia numerosa, pero yo no tenía hijos. Yavé me sacó fuera y me dijo: "Mira al cielo y cuenta las estrellas, si puedes. Así será tu descendencia." 

Christian: Y tú, como siempre, creíste al Señor. Así has pasado a la historia como el hombre de la fe y el padre de todos los creyentes. 

Abraham: No lo puedo remediar. La voz del Señor me conmueve. Me dijo: "Yo soy Yavé, que te sacó de Ur de los Caldeos, para entregarte esta tierra en propiedad". Y me dijo que le ofreciera una ternera, una cabra y un carnero, todos ellos de tres años, y también una paloma y un pichón. 

Christian: Así eran los sacrificios que se ofrecían a los dioses: se sacrificaban los animales y se consumían al fuego. 

Abraham: Cierto; así lo hacía mi padre y yo seguí la costumbre. Era el atardecer. El sol se iba acercando a la línea del horizonte, acariciando y transformando en brillantes placas de oro unas tenues nubecillas. Partí los animales por la mitad y puse una mitad frente a la otra. No tardaron mucho en aparecer las aves rapaces y yo las ahuyentaba. 

Christian: ¿Y sentías dentro a tu Dios?¿O lo esperabas con impaciencia? 

Abraham: Cuando el sol estaba a punto de ponerse, caí en un profundo sueño y se apoderó de mi un terror y una gran oscuridad. Cuando se puso el sol y estuvo completamente oscuro, un horno humeante y una antorcha encendida pasaron en medio de los animales descuartizados. Gn. 15,12.17-18. 

Fue entonces cuando el Señor hizo una alianza conmigo diciendo: "Yo he dado esta tierra a tu descendencia desde el Torrente de Egipto hasta el Gran Río, el río Éufrates". De esta alianza hablaremos en otra ocasión. 

Christian: De acuerdo, amigo.

Estad preparados

La Iglesia está de actualidad en la portada de todos los medios de comunicación, lo que la convierte en blanco perfecto para los ataques de todos sus enemigos. En estos días se van a recrudecer y vamos a ver y a oír muchas opiniones que intentarán sembrar dudas, desprestigiarla y hacernos daño. 

Es momento de tener muy claro el fundamento de nuestra fe: Los cristianos, que formamos la Iglesia, seguimos a Jesucristo, intentando poner en práctica los valores del Evangelio. Por tanto, no está basada en otras personas, ni en las instituciones fundadas por éstas. Todo lo humano es imperfecto y, en consecuencia, susceptible de equivocaciones y fallos. Cuando se produzcan, hay que intentar corregirlos con valentía y transparencia. Estamos llamados a ser luz para el mundo, y la verdad y la coherencia pueden ser dolorosas, pero purifican y sanan. Y en ningún caso, nunca, los errores humanos cometidos en la Iglesia tienen que afectar a nuestra relación con el Señor.

Respeto como mínimo

En nuestra parroquia hemos vivido una experiencia preciosa en los últimos años: Integrar en la Eucaristía los bautismos, para que toda la comunidad participe de la alegría que supone el nacimiento de un nuevo miembro en nuestra familia, la Iglesia. Pero algunos nos han defraudado. 

Hay personas ajenas que acuden ocasionalmente y desconocen el valor, el sentido, los signos y los requisitos de los sacramentos que solicitan. Y en lugar de guardar las formas, aunque sólo sea por educación, campan a sus anchas dando un espectáculo deplorable y faltando el respeto al lugar sagrado y a cuantos nos reunimos en él para celebrar nuestra fe. ¿Cómo podríamos conjugar el cariñoso acogimiento que ofrecemos, con la exigencia de una actitud respetuosa en nuestro templo?

En esta semana

  • El día 22 a las 18,30 Celebración comunitaria de la Penitencia. 
  • Días 17- 19. Triduo a S. José que terminará el día 19 con la misa a las 7 de la tarde en honor a nuestro patrón. Desde aquí invitamos a todos a celebrar el día de S. José para pedirle por todos los hogares de la parroquia y que fortalezca nuestra comunidad parroquial.



La Cabria, nº 214

HOJA PARROQUIAL DE S. JOSÉ 
DE LINARES 
DOM. 4º Cuaresma. C 
10-marzo.2013 Año V- Nº 214

Editorial

LA TENTACIÓN DE LA HUIDA

La tentación se presenta con forma de “derecho” y, si no somos capaces de desenmascararla, caemos en ella porque nos resulta fácil justificarla: “tengo derecho a ser feliz”, “si otros lo hacen por qué yo no”, “por qué voy a ser yo menos...”, “yo ya he hecho todo lo que podía...”, “no merece la pena, no voy a conseguir nada...”. 

Analicemos ahora la tentación de la huida. Jesús, antes de su Pasión, se fue a orar al Monte de los Olivos para no caer en la tentación del abandono. Y hubiera estado hasta “bien justificado”: durante tres años había estado haciendo el bien, hablando del amor misericordioso del Padre, del Reino de Dios, y ¿qué estaba consiguiendo? La traición de un amigo, caer en manos de sus enemigos, la incomprensión de su Causa y el miedo atroz de sus seguidores. Estaba totalmente abatido, su dolor era tan grande que sudó sangre, porque la suya era una dolencia moral, que es mucho más anquilosante e incapacitante que la física. Y oró para que no se hiciese su voluntad sino la del Padre. 

Les pidió a sus amigos que oraran al Padre y velaran, porque el espíritu es fuerte pero la carne es débil, y la tentación del abandono apunta directamente a la parte más débil de nuestro ser. 

Y a lo largo de la historia del cristianismo se ha ido verificando una y otra vez. ¿Cuántas veces no hemos huido de la Iglesia, no la hemos abandonado justificándonos en la mala actuación de aquel cura o aquel cristiano “pio”? ¿Cuántas veces no hemos “echado la culpa” a la jerarquía de pecados que también han sido los nuestros? ¿Cuántas veces nos hemos justificado porque no conseguimos el resultado que esperamos o pensando que ya hacíamos bastante o…? En este tiempo cuaresmal oremos mucho, para que no caigamos en la tentación de la huida, para que pasemos de este mundo al Padre tras habernos enfrentado, sin sucumbir, a los demonios de la riqueza, la soberbia, el poder, la comodidad o el abandono, como lo hizo Jesús.

Palabra de Dios

Lectura del libro de Josué. 5,9a.10-12. 

En aquellos días, el Señor dijo a Josué: -Hoy os he despojado del oprobio de Egipto. 

Los israelitas acamparon en Guilgal y celebraron la pascua al atardecer del día catorce del mes, en la estepa de Jericó. El día siguiente a la pascua, ese mismo día comieron del fruto de la tierra: panes ácimos y espigas fritas. Cuando comenzaron a comer del fruto de la tierra, cesó el maná. Los israelitas ya no tuvieron maná sino que aquel año comieron de la cosecha de la tierra de Canaán. 

Lectura de la segunda carta del apóstol San Pablo a los Corintios.5,17-2-1. 

Hermanos: El que es de Cristo es una creatura nueva: lo antiguo ha pasado, lo nuevo ha comenzado. Todo esto viene de Dios, que por medio de Cristo nos reconcilió consigo y nos encargó el servicio de reconciliar. Es decir, Dios mismo estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo, sin pedirle cuentas de sus pecados, y a nosotros nos ha confiado el mensaje de la reconciliación. Por eso, nosotros actuamos como enviados de Cristo, y es como si Dios mismo os exhortara por medio nuestro. En nombre de Cristo os pedimos que os reconciliéis con Dios. Al que no había pecado, Dios lo hizo expiar nuestros pecados, para que nosotros, unidos a él, recibamos la salvación de Dios. 

Lectura del santo Evangelio según San Lucas. 15,1-3.11-32. 

En aquel tiempo se acercaban a Jesús los publicanos y los pecadores a escucharle. Y los fariseos y los letrados murmuraban entre ellos: -Ese acoge a los pecadores y come con ellos. 

Jesús les dijo esta parábola: -Un hombre tenía dos hijos: el menor de ellos dijo a su padre: -Padre, dame la parte que me toca de la fortuna. El padre les repartió los bienes. 

No muchos días después, el hijo menor, juntando todo lo suyo, emigró a un país lejano, y allí derrochó su fortuna viviendo perdidamente. Cuando lo había gastado todo, vino por aquella tierra un hambre terrible, y empezó él a pasar necesidad. Fue entonces y tanto le insistió a un habitante de aquel país, que lo mandó a sus campos a guardar cerdos. Le entraban ganas de llenarse el estómago de las algarrobas que comían los cerdos; y nadie le daba de comer. Recapacitando entonces se dijo: -¡Cuántos jornaleros de mi padre tienen abundancia de pan, mientras yo aquí me muero de hambre! Me pondré en camino adonde está mi padre, y le diré: «Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo: trátame como a uno de tus jornaleros». Se puso en camino adonde estaba su padre: cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y se conmovió; y echando a correr, se le echó al cuello y se puso a besarlo. 

Su hijo le dijo: -Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo. Pero el padre dijo a sus criados: -Sacad en seguida el mejor traje, y vestidlo; ponedle un anillo en la mano y sandalias en los pies; traed el ternero cebado y matadlo; celebremos un banquete; porque este hijo mío estaba muerto y ha revivido; estaba perdido y lo hemos encontrado. Y empezaron el banquete. Su hijo mayor estaba en el campo. Cuando al volver se acercaba a la casa, oyó la música y el baile, y llamando a uno de los mozos, le preguntó qué pasaba. Este le contestó: -Ha vuelto tu hermano; y tu padre ha matado el ternero cebado, porque lo ha recobrado con salud. El se indignó y se negaba a entrar; pero su padre salió e intentaba persuadirlo. Y él replicó a su padre: -Mira: en tantos anos como te sirvo, sin desobedecer nunca una orden tuya, a mí nunca me has dado un cabrito para tener un banquete con mis amigos; y cuando ha venido ese hijo tuyo que se ha comido tus bienes con malas mujeres, le matas el ternero cebado. El padre le dijo: -Hijo, tú estás siempre conmigo, y todo lo mío es tuyo: deberías alegrarte, porque este hermano tuyo estaba muerto y ha revivido, estaba perdido, y lo hemos encontrado

Hacia Dios por los caminos de la Biblia, nº 63

Más sobre Melquisedec 

Christian: (Cristiano o seguidor de Cristo): Querido amigo Abraham: ante la figura tan misteriosa y sugestiva de Melquisedec, te voy a rogar que me .digas algo más de él 

Abraham: Y lo hago con mucho gusto. Este encuentro me cogió de improviso. Yo no lo esperaba ni podía esperarlo porque no le conocía. 

Christian: Pero como estuvísteis hablando largo y tendido, estoy seguro de que tendrás cosas que decirme. 

Abraham: Me dijo que era Rey de una pequeña aldea que con el tiempo se llamará Jerusalén. Se trata de la Jerusalén que ha pasado a la historia y que se encuentra en una zona montañosa. 

Christian: Es entonces de la Jerusalén que todos conocemos, que, con su templo, era el centro de la vida religiosa, social y política del pueblo israelita. 

Abraham: Cierto, amigo Christian. Como dijimos el otro día, él me trajo pan y vino y yo le di el diezmo del botín que llevaba. (El diezmo es la parte de Dios). 

Christian: Entonces, amigo Abraham, si el diezmo es la parte de Dios, te consideraste inferior a Melquisedec. Además dicen que siempre el que bendice es superior al que recibe la bendición, y fue este personaje tan misterioso quien te bendijo. 

Abraham: La verdad es que yo ni pensé en eso. Al recibir la bendición, me llené de alegría y le di gracias a Dios. 

Christian: Con la cantidad de bendi-ciones que recibo y, lo digo como lo siento, muchas veces me quedo tan tranquilo; ni me alegro ni doy gracias a Dios. 

Abraham: Tienes que animarte y ver siempre caminos abiertos. 

Christian: Lo intentaré. Volviendo a nuestro personaje, te diré que Melqui-sedec, rey y sacerdote, aparece como un pagano, que ama a Dios como puede, y que es figura de Jesucristo, Rey de la verdadera Jerusalén y sacerdote eterno “según el orden de Melquisedec”.(Sal. 110,4).

Ve y lo cuentas

FRENTE A LA HUIDA: FE, AMOR Y FIDELIDAD 

Gracias a Dios, el Espíritu alienta a personas santas en la perseverancia en el amor a Cristo y al Iglesia: San Francisco de Asís, Santa Teresa, Santo Tomás Moro, y tantos y tantos santos conocidos y anónimos son un buen ejemplo de ello porque optaron por no abandonar, por no huir, por hacer lo mismo que hizo Jesús, aunque su contexto histórico, político y/o eclesial invitara a ello. 

Santo Tomás Moro es ejemplo de fidelidad a Dios y a la iglesia. Nació en Londres en 1477. Es patrono de los gobernantes y los políticos. Fue hombre de gran sabiduría, reformador, amigo de varios obispos. 

En 1516 escribió su famoso libro "Utopía". Atrajo la atención del rey Enrique VIII quién lo eligió para varios puestos importantes y nombrándolo canciller. En el culmen de su carrera Tomás renunció a esa situación privilegiada, cuando el rey Enrique persistió en repudiar a su esposa para casarse con Ana Bolena, para lo cual se disponía a romper la unidad de la Iglesia y formar la iglesia anglicana bajo su autoridad. 

En 1534, con su buen amigo el obispo y santo Juan Fisher, rehusó rendir obediencia al rey como cabeza de la iglesia. Estaba dispuesto a obedecer al rey dentro de su campo de autoridad, que era lo civil, pero no aceptaba la usurpación de la autoridad sobre la Iglesia. Tomás y el obispo Fisher se ayudaron mutuamente a mantenerse fieles a Cristo en un momento en que la gran mayoría cedía ante la presión del rey por miedo a perder sus vidas. Ellos demostraron lo que es ser de verdad discípulos de Cristo y el significado de la verdadera amistad. Ambos pagaron el máximo precio. 

Sto. Tomás fue juzgado y condenado como traidor al decir a la corte que no podía ir en contra de su conciencia. Antes de ser decapitado (1535), dijo a la gente congregada que él moría como "buen servidor del rey, pero primero de Dios" Qué gran modelo es Santo Tomás Moro para todos, en especial para los políticos, gobernantes y abogados. Pidámosle que su valentía les (y nos) inspire para mantenernos firmes e íntegros en la Verdad.

Para reflexionar

"El hombre no puede ser separado de Dios, ni la política de la moral" (Sto. Tomás Moro)