HOJA PARROQUIAL DE
S. JOSÉ DE LINARES
DOM. –VIII- del T.O –A-
26 de febrero de 2017
Año -X- Nº 380
CUARESMA
Pues ya tenemos encima el Miércoles de Ceniza, la Cuaresma y, en menos de lo que nos parece, la Semana Santa otra vez.
¿Otra vez? Sí, sin duda, los distintos ciclos del año van pasando una vez tras otra mientras nosotros permanecemos en nuestras cosas, en nuestro pequeño mundo.
Lo que ocurre es que nuestro pequeño mundo es quizá demasiado pequeño e inmóvil, y tenemos que hacer un esfuerzo en no anquilosarnos, en estar siempre dispuestos al cambio, y si puede ser, al cambio a mejor.
Excusas para hacerlo no nos faltan, sobre todo si de verdad nos sentimos cristianos además de decir que lo somos. La Palabra de este domingo, por ejemplo, sería para ponerle un marco y colgarla en algún sitio de privilegio de nuestra casa donde no podamos dejar de mirarla.
Jesús contrapone dos mundos, el de Dios y el que simboliza el dinero, pero que va más allá, porque engloba todas esas preocupaciones que no nos dejan mirar más allá. Él nos pone esos ejemplos tan fáciles de entender (si hasta los pájaros del cielo tienen de todo; si hasta las flores crecen en hermosura…) para que logremos centrarnos en lo sustancial, el reino de Dios y su justicia: ¿y lo demás? “se os dará por añadidura”.
Por su parte, San Pablo pone el dedo en la llaga de otro de nuestros grandes defectos, el de juzgar constantemente y según nuestras leyes. En el fondo, contrapone también el mundo de Dios con el de la injusticia del hombre, invitándonos a dejar que sea el Señor el que ilumine realmente “lo que esconden las tinieblas” y ponga al descubierto “los designios del corazón”. ¿Por qué nos empeñamos en juzgar, en poner etiquetas, en levantar muros de prejuicios? La invitación más hermosa es que, por el contrario, seamos capaces de que “la gente solo vea en nosotros servidores de Cristo y administradores de los misterios de Dios”. Nada menos.
PALABRA DE DIOS
Lectura del libro de Isaías. Is 49, 14-15
SIÓN decía: «Me ha abandonado el Señor, mi dueño me ha olvidado».
¿Puede una madre olvidar al niño que amamanta, no tener compasión del hijo de sus entrañas? Pues, aunque ella se olvidara, yo no te olvidaré.
Palabra de Dios
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios. 1 Cor 4, 1-
Hermanos:
Que la gente solo vea en nosotros servidores de Cristo y administradores de los misterios de Dios. Ahora, lo que se busca en los administradores es que sean fieles. Para mí lo de menos es que me pidáis cuentas vosotros o un tribunal humano; ni siquiera yo me pido cuentas. La conciencia, es verdad, no me remuerde; pero tampoco por eso quedo absuelto: mi juez es el Señor. Así, pues, no juzguéis antes de tiempo, dejad que venga el Señor. Él iluminará lo que esconden las tinieblas y pondrá al descubierto los designios del corazón; entonces cada uno recibirá de Dios lo que merece.
Palabra de Dios
Lectura del santo Evangelio según san Mateo. Mt 6, 24-34
EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Nadie puede servir a dos señores. Porque despreciará a uno y amará al otro; o, al contrario, se dedicará al primero y no hará caso del segundo. No podéis servir a Dios y al dinero.
Por eso os digo: no estéis agobiados por vuestra vida pensando qué vais a comer, ni por vuestro cuerpo pensando con qué os vais a vestir. ¿No vale más la vida que el alimento, y el cuerpo que el vestido? Mirad los pájaros del cielo: no siembran ni siegan, ni almacenan y, sin embargo, vuestro Padre celestial los alimenta. ¿No valéis vosotros más que ellos? ¿Quién de vosotros, a fuerza de agobiarse, podrá añadir una hora al tiempo de su vida? ¿Por qué os agobiáis por el vestido? Fijaos cómo crecen los lirios del campo: ni trabajan ni hilan. Y os digo que ni Salomón, en todo su fasto, estaba vestido como uno de ellos. Pues si a la hierba, que hoy está en el campo y mañana se arroja al horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más por vosotros, gante de poca fe? No andéis agobiados pensando qué vais a comer, o qué vais a beber, o con qué os vais a vestir. Los paganos se afanan por esas cosas. Ya sabe vuestro Padre celestial que tenéis necesidad de todo eso. Buscad sobre todo el reino de Dios y su justicia; y todo esto se os dará por añadidura. Por tanto, no os agobiéis por el mañana, porque el mañana traerá su propio agobio. A cada día le basta su desgracia».
Palabra del Señor
NOS HABLA EL PAPA
Lo que está ocurriendo en Occidente es que se ataca sistemáticamente a la institución “familia”, dándola como algo superado y considerando que los valores que se venían manteniendo en ella obstaculizan el “progreso” en libertad de la humanidad. Pensando que la familia, en definitiva, era el recinto en donde se encontraban concentrados los grandes valores del cristianismo, que son los que Cristo dejó como misión a la Iglesia, se empezó a atacar (y sigue haciéndose) los pilares básicos de toda la sociedad. Esto no ha ocurrido en otros sitios del planeta, donde los valores fundamentales de la familia se siguen sosteniendo y, gracias a ello, esos pueblos se siguen manteniendo hoy vivos:
“En algunos países, especialmente en distintas partes de África, el secularismo no ha logrado debilitar algunos valores tradicionales, y en cada matrimonio se produce una fuerte unión entre dos familias ampliadas, donde todavía se conserva un sistema bien definido de gestión de conflictos y dificultades.
En el mundo actual también se aprecia el testimonio de los matrimonios que no sólo han perdurado en el tiempo, sino que siguen sosteniendo un proyecto común y conservan 31 el afecto. Esto abre la puerta a una pastoral positiva, acogedora, que posibilita una profundización gradual de las exigencias del Evangelio”. (38)
NUESTROS ENFERMOS
Enfermo: Esta situación me hace sentirme mal, necesito que me escuchen, pues mientras esto se va dando, yo siento que me voy muriendo, que me quedo sin fuerzas y el único refugio que tengo es la Virgen María y Jesús crucificado, a quienes me uno y les pido que me acojan y me ayuden a llevar, aunque sea arrastrando, esta cruz que me ha caído y que no puedo soportar, pues mi misma familia, guiados por lo que dice el médico me están catalogando como un psicópata que se apropia de todas las enfermedades que va conociendo
En esta soledad e incomprensión veo que todos me van dando de lado y cada uno me dice lo que se le ocurre, pero nadie quiere sentarse un rato a mi lado y dejarme que le diga todo esto que te cuento, querida Cabria; esto que siento y lo que llevo dentro; me siento como un animalito acorralado al que le obligan a entrar por un callejón que no tiene más salida que la muerte.
500 AÑOS DE LA REFORMA
El pasado 31 de octubre al Papa Francisco participó en una ceremonia por el 500 aniversario de la Reforma Protestante, donde oró con los jerarcas de la Iglesia luterana nacional y pidió a católicos y luteranos ir más allá de los “errores” del pasado para forjar una mayor unidad, inclusive la participación común en la Eucaristía (Fuente: http://www.eluniverso.com). Esta y otras actividades forman parte de los actos que la Federación Luterana Mundial (FLM) y el Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos (PCPOC) han programado durante este año para conmemorar esta fecha tan dramática en la historia de la Iglesia.
Y cuando escribimos Iglesia, así, con mayúscula, hablamos de la única iglesia, la asamblea de los cristianos, porque más allá de las divisiones que los hombres hayamos creado en el devenir de los siglos, no podemos olvidar que Jesús fundó una sola comunidad.
A pesar del escándalo que supone después de 500 años la división entre nuestros hermanos protestantes luteranos y la iglesia católica de Roma, podemos al menos congratularnos de que acabaron los conflictos políticos que durante estos siglos adoptaron la excusa del cisma para cometer el más terrible de los pecados, el de matar en nombre de Dios y, lo que es peor aún, en nombre de Cristo.
Desgraciadamente existen intereses creados de sobra, por ambas partes, para evitar que cristianos de uno y otro lado del cisma podamos unirnos a celebrar juntos nuestra fe. Y ese sería el mejor de los comienzos para una auténtica reunificación. Por eso, el gesto del Papa y su alusión a forjar las condiciones para que podamos compartir al menos la Eucaristía son, sin duda, un gran paso del largo camino que aún debemos recorrer.
EN ESTA SEMANA
- Día 1- Reunión padres de 1º
- Día 2- Reunión padres de 3º
- Día 6- Reunión padres de 4º
- Día 7- Reunión padres de 2º
- Día 1- MIÉRCOLES DE CENIZA
- Día 3- Celebración del PERDÓN
