La Cabria, nº 301

HOJA PARROQUIAL DE S. JOSÉ DE LINARES
DOMINGO -I- DE PASCUA.-B
5 DE ABRIL de 2015
Año -VI- Nº 301

Editorial

Sepulcro vacío

Son varias las ocasiones en que el evangelio de Juan, quien más directamente vivió todos los acontecimientos que rodearon a la vida de Jesús, nos sorprende por su forma de presentar el núcleo del mensaje de Cristo.

Una de ellas la recordamos el Jueves Santo, en el lavatorio de los pies. Mientras los otros tres evangelistas se centran en presentar la instauración de la Eucaristía, Juan nos enseña la otra cara de esa moneda cuando cede el lugar en su evangelio al gesto de un Jesús, Cristo, Hijo de Dios, cumpliendo con la labor de los esclavos.

Una segunda ocasión de esta forma tan especial de Juan Evangelista de contar la historia de la Buena Noticia se presenta precisamente hoy, Domingo de Pascua, en torno al signo del sepulcro vacío.

Dice el Evangelio que al ver el sepulcro vacío, “vio y creyó”. No necesitó nada más, le bastó para atar cabos y entender lo que Jesús les había anticipado que iba a pasar.

Ese mensaje que Juan recibió y transmitió hace dos mil y pico años es el que nosotros hoy debemos a su vez recibir y transmitir: ¡Hermanos! ¡El sepulcro está vacío! ¡Aleluya!

Cada vez que sintamos la pena de la pérdida de un ser querido, recordemos ¡el sepulcro está vacío! ¡Aleluya! Cada vez que el dolor de la enfermedad nos atenace, recordemos ¡el sepulcro está vacío! Si nos supera la sinrazón del ser humano frente a la injusticia, levantémonos porque ¡el sepulcro está vacío!

Aquel sepulcro vacío es la piedra angular de nuestra existencia de hoy, que puede y debe basarse en la esperanza de un Cristo muerto y resucitado que vence al dolor, al pecado y a la muerte para gloria de Dios y salvación de todos nosotros.

¡Feliz Pascua!

PALABRA DE DIOS

Lectura de los Hechos de los Apóstoles 10, 34a. 37 43

En aquellos días, Pedro tomó la palabra y dijo:

Hermanos: Vosotros conocéis lo que sucedió en el país de los judíos, cuando Juan predicaba el bautismo, aunque la cosa empezó en Galilea. Me refiero a Jesús de Nazaret, ungido por Dios con la fuerza del Espíritu Santo, que pasó haciendo el bien y curando a los oprimidos por el diablo; porque Dios estaba con él.

Nosotros somos testigos de todo lo que hizo en Judea y en Jerusalén. Lo mataron colgándolo de un madero. Pero Dios lo resucitó al tercer día y nos lo hizo ver, no a todo el pueblo, sino a los testigos que él había designado: a nosotros, que hemos comido y bebido con él después de su resurrección.

Nos encargó predicar al pueblo, dando solemne testimonio de que Dios lo ha nombrado juez de vivos y muertos. El testimonio de los profetas es unánime: que los que creen en él reciben, por su nombre, el perdón de los pecados.

Palabra de Dios

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Colosenses 3, 1 4

Hermanos:

Ya que habéis resucitado con Cristo, buscad los bienes de allá arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios; aspirad a los bienes de arriba, no a los de la tierra.

Porque habéis muerto; y vuestra vida está con Cristo escondida en Dios. Cuando aparezca Cristo, vida nuestra, entonces también vosotros apareceréis, juntamente con él, en gloria.

Palabra de Dios

Lectura del santo Evangelio según San Juan 20, 1 9

El primer día de la semana, María Magdalena fue al sepulcro al amanecer, cuando aún estaba oscuro, y vio la losa quitada del sepulcro.

Echó a correr y fue donde estaba Simón Pedro y el otro discípulo, a quien quería Jesús, y les dijo:

Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto.

Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro. Los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corría más que Pedro; se adelantó y llegó primero al sepulcro; y, asomándose, vio las vendas en el suelo: pero no entró.

Llegó también Simón Pedro detrás de él y entró en el sepulcro: Vio las vendas en el suelo y el sudario con que le habían cubierto la cabeza, no por el suelo con las vendas, sino enrollado en un sitio aparte.

Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro; vio y creyó.

Pues hasta entonces no habían entendido la Escritura: que él había de resucitar de entre los muertos

Palabra del Señor

LO QUE DICE EL PAPA

En este tiempo de pascua que hemos iniciado, en el que confesamos que Cristo ha resucitado y que nosotros somos testigos, lo peor que le puede ocurrir a un cristiano y el anti testimonio más grande que puede dar es justamente perder el sentido de la vida y de la lucha cuando lo apoyamos en la fe, pues entonces da la batalla por perdida antes de pelearla y llega a convencerse que no vale la pena luchar, puesto que no vamos a conseguir nada y cae en un pesimismo en el que, desencantado de todo, vive amargado y sin esperanza; el papa lo expresa de una manera muy gráfica:

“Una de las tentaciones más serias que ahogan el fervor y la audacia es la conciencia de derrota que nos convierte en pesimistas quejosos y desencantados con cara de vinagre. Nadie puede emprender una lucha si de antemano no confía plenamente en el triunfo”

De la misma manera que hemos indicado que el pesimismo puede dar lugar a la desesperanza porque estamos marcados por el inmediatismo y buscamos resultados reales y tangibles, de la misma manera nos puede ocurrir cuando perdemos la verdadera dimensión del cristiano: nuestra llamada es a DAR: Cristo nos lo ha dado todo para que nosotros sigamos dando; el Papa nos dirá que somos “cántaros” a los que todo el mundo debe venir a saciar a su sed

“Estamos llamados a ser personas-cantaros para dar de beber a los demás. A veces el cántaro se convierte en una pesada cruz, pero fue precisamente en la cruz donde, traspasado, el Señor se nos entregó como fuente de agua viva. No nos dejemos robar la esperanza”

LA PASCUA (SILVIA ZURDO)

Pascua llega como invitación
a hacer un alto en el camino.
Pascua es tiempo de oración
y pensamiento divino.

Pascua es tiempo de optimismo,
de esperanza y de perdón.
La Pascua llega a todos
para lograr paz interior.

Pascua es fiesta, es vida nueva.
Pascua es paso a algo mejor.
Pascua es renovar efectos
para vivir con más ilusión.

¡Felices Pascuas!

HAMBRE DE TÍ (PEDRO CASALDÁLIGA)

«Amor de Ti nos quema,
blanco Cuerpo».

Unamuno

Hambre de Ti nos quema, Muerto vivo,
Cordero degollado en pie de Pascua.

Sin alas y sin áloes testigos,
somos llamados a palpar tus llagas.

En todos los recodos del camino
nos sobrarán Tus pies para besarlas.

Tantos sepulcros por doquier, vacíos
de compasión, sellados de amenazas.
Callados, a su entrada, los amigos,
con miedo del poder o de la nada.

Pero nos quema aun tu hambre, Cristo,
y en Ti podremos encender el alba.

¡VIVE!


EN ESTA SEMANA

  • Día 6- Reunión padres de 2º
  • Día 7- Reunión padres de 4º
  • Día 8- Reunión padres de 3º
  • Día 9- Reunión padres de 1º