HOJA PARROQUIAL DE S. JOSÉ
DE LINARES
DOMINGO 5º CUARESMA.
22 Marzo-2015
Año VI- Nº 299
Editorial
LAS VÍCTIMAS OLVIDADAS DE LA VIOLENCIA SEXUAL
Hay una tragedia que nos pasa casi desapercibida, “la de los niños nacidos de la guerra”, es decir, aquellos que han sido engendrados por la violación de sus madres en conflictos bélicos. Las guerras han surcado la historia de la humanidad y, en la misma medida, los atacantes, invasores o agresores han utilizado a la mujer para humillar al pueblo, al que subyugan con violaciones para que pierda su “pureza de sangre”. Así de sencillo, claro, dramático y vil.
¿Pero qué pasa después, una vez acabado el conflicto, con estas mujeres y niños? En la mayoría de los casos son rechazados: los ven como “hijos del enemigo”, no se les reconocen derechos y son totalmente marginados. Y la experiencia, en muchos casos, nos muestra como las madres se niegan a abandonar a estos hijos y corren la misma suerte.
Así ocurrió con los niños noruegos de Lebensborn, huérfanos que fueron procreados por nazis durante la ocupación alemana en la Segunda Guerra Mundial, o con hijos de las guerras de la ex Yugoslavia en la década de los noventa. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos en el primer caso, y organismos como Unicef, en el segundo, rechazaron las solicitudes de indemnización o atención especial para estos supervivientes de la violencia sexual y del espantoso estigma que padecieron desde las guerras. Durante el genocidio de 1994 en Ruanda unos 20.000 niños nacieron producto de violaciones. No tuvieron derecho a acceder a programas para supervivientes y fueron olvidados. Hoy en día esto está ocurriendo en Uganda, Nigeria, Sierra Leona, la República Democrática de El Congo y el sur de Sudán.
Y así está ocurriendo con los cientos de cristianos y minorías secuestrados por los terroristas del Estado Islámico, que obliga a las mujeres y niñas de los grupos secuestrados a casarse y a ser esclavas sexuales. Mientras que los líderes mundiales titubean para responder a los ataques del ISIS, otra crisis se avecina: el incierto futuro de estas mujeres y jóvenes, y los niños que concebirán durante su cautiverio.
La Pasión de Cristo se repite porque el odio, la violencia, la intolerancia aplasta a los indefensos y una buena parte de la humanidad mira para otro lado.
PALABRA DE DIOS
Lectura del profeta Jeremías 31,31‑34
Mirad que llegan días -oráculo del Señor- en que haré con la casa de Israel y la casa de Judá una alianza nueva. No como la alianza que hice con sus padres, cuando los tomé de la mano para sacarlos de Egipto: ellos quebrantaron mi alianza, aunque yo era su Señor -oráculo del Señor-. Sino que así será la alianza que haré con ellos, después de aquellos días -oráculo del Señor-: Meteré mi ley en su pecho, la escribiré en sus corazones; yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Y no tendrá que enseñar uno a su prójimo, el otro a su hermano, diciendo: *Reconoce al Señor.+ Porque todos me conocerán, desde el pequeño al grande -oráculo del Señor-, cuando perdone sus crímenes y no recuerde sus pecados.
Palabra de Dios
Lectura de la carta a los Hebreos 5,7‑9
Cristo, en los días de su vida mortal, a gritos y con lágrimas, presentó oraciones y súplicas al que podía salvarlo de la muerte, cuando en su angustia fue escuchado.
Él, a pesar de ser Hijo, aprendió, sufriendo, a obedecer. Y, llevado a la consumación, se ha convertido para todos los que le obedecen en autor de salvación eterna.
Palabra de Dios.
Lectura del santo evangelio según S. Juan 12,20‑33
En aquel tiempo, entre los que habían venido a celebrar la fiesta había algunos griegos; éstos, acercándose a Felipe, el de Betsaida de Galilea, le rogaban: *Señor, quisiéramos ver a Jesús.+
Felipe fue a decírselo a Andrés; y Andrés y Felipe fueron a decírselo a Jesús.
Jesús les contestó: *Ha llegado la hora de que sea glorificado el Hijo del hombre. Os aseguro que si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto. El que se ama a sí mismo se pierde, y el que se aborrece a sí mismo en este mundo se guardará para la vida eterna. El que quiera servirme, que me siga, y donde esté yo, allí también estará mi servidor; a quien me sirva, el Padre lo premiará.
Ahora mi alma está agitada, y ¿qué diré?: Padre, líbrame de esta hora. Pero si por esto he venido, para esta hora. Padre, glorifica tu nombre.+
Entonces vino una voz del cielo: *Lo he glorificado y volveré a glorificarlo.+
La gente que estaba allí y lo oyó decía que había sido un trueno; otros decían que le había hablado un ángel.
Jesús tomó la palabra y dijo: *Esta voz no ha venido por mí, sino por vosotros. Ahora va a ser juzgado el mundo; ahora el Príncipe de este mundo va a ser echado fuera. Y cuando yo sea elevado sobre la tierra atraeré a todos hacia mí.+
Esto lo decía dando a entender la muerte de que iba a morir.
Palabra del Señor.
EL PAPA HA DICHO
Encuadrados en este marco de vida de apatía y tibieza, empezamos a funcionar al estilo y en los esquemas del sistema de vida imperante, con lo que los agentes de pastoral caen en el mismo inmediatismo del sistema e impiden que el crecimiento y la vivencia de la fe se desarrollen, pues consideran un fracaso cualquier cosa que se hace y no produce la respuesta inmediata que exige el sistema
“El inmediatismo ansioso de estos tiempos hace que los agentes pastorales no toleren fácilmente lo que signifique alguna contradicción, un aparente fracaso, una crítica, una cruz”
Necesariamente, cuando entramos en esa dinámica y queremos asimilar la respuesta en la fe a las respuestas que da el sistema económico, en donde el pragmatismo y el inmediatismo se imponen como norma, la fe en esta dinámica se pierde, se diluye y se convierte en un sin sentido:
“La mayor amenaza es el gris pragmatismo de la vida cotidiana… La fe se va desgastando y degenerando en mezquindad. Se desarrolla la sicología de la tumba, que poco a poco convierte a los cristianos en momias de museo… ¡No nos dejemos robar la alegría evangelizadora!
TESTIMONIO DE FE
De Siria a Pakistán, este último país nos ha vuelto a trasladar una imagen de persecución y desolación. Dos atentados perpetrados de forma simultánea contra dos iglesias en un área cristiana de la ciudad de Lahore, en el noreste de Pakistán, mataron el pasado domingo 15 de marzo a 15 cristianos y 75 resultaron heridos. Es un atentado que se ha producido cuando decenas de personas asistían a la Misa del domingo
Pero no ceden ante los terroristas "¿¡Qué te maten por ir a Misa!? No tenemos miedo" dice la hermana Pilar Vila, 18 años en Pakistán.
Y nosotros, poniendo multitud de excusas para justificar que no podemos ir a misa el domingo...
El Papa Francisco volvió a condenar, con rostro adolorido, este enésimo atentado contra cristianos. Pidió oraciones por las víctimas, sus familias y para que la persecución contra ellos termine. "Nuestros hermanos derraman su sangre sólo porque son cristianos. Mientras aseguro mi oración por las víctimas y sus familias, pido al Señor, imploro al Señor, fuente de todo bien, el don de la paz y la concordia para ese país. Que esta persecución contra los cristianos, que el mundo intenta esconder, termine y haya paz”.
¡Recemos por su fortaleza, no podemos dejarles solos!
ESCENAS DE PASIÓN
Más de 100 feligreses de Sta. Bárbara han vuelto a representar este año “Escenas de Pasión”, bellísima catequesis sobre La Pasión, Muerte y Resurrección. Les damos la enhorabuena por el trabajo realizado: una espectacular puesta en escena, un vestuario de época magnífico, música preciosa y efectos de luz y sonido que creaban una atmósfera especial. Un hermosísimo espectáculo, que demuestra como cuando hay armonía, y se trabaja en la misma dirección, se consiguen grandes cosas.
Nuestra gratitud a todo el grupo que conforman “Escenas de Pasión” y a su párroco, Manolo Valenzuela, por esta bella representación.
EN ESTA SEMANA
El próximo día 27, VIERNES DE DOLORES, a las 5 de la tarde, tendremos un encuentro con los niños de Confirmación.
A las 6´30 celebraremos el PERDÓN como la mejor actitud y disposición para celebrar la PASCUA.
El sábado en la tarde, celebraremos la bendición de los ramos como inicio de la fiesta de la ENTRADA DE JESÚS EN JERUSALÉN.
