La Cabria, nº 131


HOJA PARROQUIAL DE SAN JOSÉ
DE LINARES
DOM. 3º Cuaresma A
27 MARZO 2011
Año -II- Nº 131

EDITORIAL

DÍA INTERNACIONAL DE LA VIDA

En el primer Congreso Internacional Provida, celebrado en Madrid en el 2003, tras una encuesta mundial contestada por más de 20.000 grupos y asociaciones de más de 20 países de Europa y América, se acordó declarar el 25 de marzo el día Internacional de la Vida. En este día se celebra no sólo el derecho a nacer de los concebidos sino el respeto a la vida y la dignidad de todo ser humano desde la concepción hasta la muerte natural.

En España desde años antes que se despenalizara el aborto, las asociaciones provida venían desarrollando una importante labor de ayuda a la embarazada en dificultades, así como una incansable labor de divulgación de la cultura de la vida, congresos, trabajo de investigación, apoyo a los cuidados paliativos etc. Hubo grandes manifestaciones y actos públicos en defensa de la vida, en distintas fechas.

Las asociaciones que en España defienden la vida humana y su dignidad, han decidido celebrar juntas el día Internacional de la Vida, cada 25 de marzo con una manifestación por la Vida, aparte de los distintas actividades formativas, de concienciación o culturales que en torno a este día organice cada grupo.

Los defensores de la vida desde su concepción a su fin natural saldremos a la calle este año para decir bien alto, como en las marchas anteriores, que no queremos esta ley del aborto, ni la anterior, ni ninguna otra. Y que tampoco estamos dispuestos a aceptar esa nueva ley de "eutanasia encubierta" que se está preparando, porque la muerte más digna es aquella que respeta el derecho a la vida también en su fase final.

Trabajaremos porque se vayan sumando a la celebración de este día cada vez más personas y grupos, seguros de que algún día el triunfo de la cultura de la vida será una realidad.


PALABRA DE DIOS

Lectura del libro del Éxodo 17,3 7
En aquellos días, el pueblo, torturado por la sed, murmuró contra Moisés: "¿Nos has hecho salir de Egipto para hacernos morir de sed a nosotros, a nuestros hijos y a nuestros ganados?" Clamó Moisés al Señor y dijo: "¿Qué puedo hacer con este pueblo? Poco falta para que me apedreen." Respondió el Señor a Moisés: "Preséntate al pueblo llevando contigo algunos de los ancianos de Israel; lleva también en tu mano el cayado con que golpeaste el río, y vete, que allí estaré yo ante ti, sobre la peña, en Horeb; golpearás la peña, y saldrá de ella agua para que beba el pueblo." Moisés lo hizo así a la vista de los ancianos de Israel. Y puso por nombre a aquel lugar Masá y Meribá, por la reyerta de los hijos de Israel y porque habían tentado al Señor, diciendo: "¿Está o no está el Señor en medio de nosotros?"

Lectura de la carta del apóstol S. Pablo a los Romanos 5, 1 2.5 8
Hermanos: Ya que hemos recibido la justificación por la fe, estamos en paz con Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo. Por él hemos obtenido con la fe el acceso a esta gracia en que estamos: y nos gloriamos, apoyados en la esperanza de alcanzar la gloria de Dios. Y la esperanza no defrauda, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones con el Espíritu Santo que se nos ha dado.

Lectura del santo evangelio según S. Juan 4,5 42
En aquel tiempo, llegó Jesús a un pueblo de Samaria llamado Sicar, cerca del campo que dio Jacob a su hijo José; allí estaba el manantial de Jacob. Jesús, cansado del camino, estaba allí sentado junto al manantial. Era alrededor del mediodía. Llega una mujer de Samaria a sacar agua, y Jesús le dice: "Dame de beber." Sus discípulos se habían ido al pueblo a comprar comida. La samaritana le dice: "¿Cómo tú, siendo judío, me pides de beber a mí, que soy samaritana?" Porque los judíos no se tratan con los samaritanos. Jesús le contestó: "Si conocieras el don de Dios y quién es el que te pide de beber, le pedirías tú, y él te daría agua viva." La mujer le dice: "Señor, si no tienes cubo, y el pozo es hondo, ¿de dónde sacas el agua viva?; ¿eres tú más que nuestro padre Jacob, que nos dio este pozo, y de él bebieron él y sus hijos y sus ganados?" Jesús le contestó: "El que bebe de esta agua vuelve a tener sed; pero el que beba del agua que yo le daré nunca más tendrá sed: el agua que yo le daré se convertirá dentro de él en un surtidor de agua que salta hasta la vida eterna." La mujer le dice: "Señor, dame esa agua: así no tendré más sed, ni tendré que venir aquí a sacarla."
Señor, veo que tú eres un profeta. Nuestros padres dieron culto en este monte, y vosotros decís que el sitio donde se debe dar culto está en Jerusalén." Jesús le dice: "Créeme, mujer: se acerca la hora en que ni en este monte ni en Jerusalén daréis culto al Padre. Vosotros dais culto a uno que no conocéis; nosotros adoramos a uno que conocemos, porque la salvación viene de los judíos. Pero se acerca la hora, ya está aquí, en que los que quieran dar culto verdadero adorarán al Padre en espíritu y verdad, porque el Padre desea que le den culto así. Dios es espíritu, y los que le dan culto deben hacerlo en espíritu y verdad." La mujer le dice: "Sé que va a venir el Mesías, el Cristo; cuando venga, él nos lo dirá todo." Jesús le dice: "Soy yo, el que habla contigo."
En aquel pueblo muchos creyeron en él Así, cuando llegaron a verlo los samaritanos, le rogaban que se quedara con ellos. Y se quedó allí dos días. Todavía creyeron muchos más por su predicación, y decían a la mujer: "Ya no creemos por lo que tú dices; nosotros mismos lo hemos oído y sabemos que él es de verdad el Salvador del mundo."


DIÁLOGOS DESDE EL EVANGELIO

N: Querido Maestro: Es encantadora la escena en que apareces junto al pozo de Jacob, con la mujer samaritana. Te saltaste todas las normas: la prohibición de hablar a solas con una mujer y, además, siendo samaritana, de un pueblo –Samaría –con el que los judíos no os hablabais.

+Jesús: Es que, muy estimado amigo, yo no entiendo de razas, ni de lenguas, ni de distintas religiones. Mi corazón no tiene fronteras.

N: Ojalá, amigo Jesús, que todos pensáramos y nos comportáramos igual.

+Jesús: Claro, es que todos somos hijos del mismo Padre. Yo estaba muerto de sed, hacía un calor sofocante, el calor propio del medio día del verano; las siembras, doradas ya y listas para la siega se mantenían quietas, con sus espigas inclinadas por el peso, y no tuve más remedio que decir a aquella mujer: dame de beber.

N: Y se quedaría extrañada.

+Jesús: Más que extrañada, pero su extrañeza creció cuando le ofrecí el agua que quita la sed para siempre. Lógicamente, me pidió de esa agua, pues también ella quería convertirse en un manantial que salta hasta la vida eterna.

N: Y hablasteis de su vida, de sus problemas, de sus intentos de sentar cabeza…Y, cómo no, de religión. Y empezó a llamarte Señor, y profeta y te habló de la espera del Mesías; y cuando le dijiste: "Soy yo, el que habla contigo." volvió a Sicar, su pueblo (hasta se le olvidó el cántaro) y habló de ti, hasta el punto que mucho creyeron y te pidieron que te quedaras con ellos.

+Jesús: Querido amigo: testimonios como el de aquella mujer hacen mucha falta en nuestros días. Hay en nuestro mundo mucha sed de paz, de justicia, de comprensión, de ilusión, de entrega a los más necesitados. Es preciso calmar toda esa sed, que padece mucha gente.


VE Y LO CUENTAS

A propósito del Día Internacional de la Vida queremos rendir un homenaje a todas las personas que cuidan día y noche de enfermos crónicos (padres, hijos, hermanos, maridos o esposas), porque ellos sí que son activistas en la defensa de la vida. Son más que cirineos, porque a Simón de Cirene lo encontraron y lo obligaron a llevar la cruz (Mt 27, 32) en cambio ellos, voluntaria y calladamente, cogen la cruz de su familiar y movidos por el amor le ayudan a llevarla sin importarles que ellos también van dejando parte de su salud por el camino. Y no podemos dejar de decir que la mayoría son mujeres y que a lo largo de la historia de la humanidad han compartido la cruz de sus familiares enfermos porque va inscrito en su naturaleza que son dadoras de vida y por tanto sustentadoras de ella hasta entregar la suya propia. No salen en los libros de historia, aunque hayan sido auténticas heroínas, por eso las traemos hasta aquí para hacerlas presentes y para que valoremos la gran labor que realizan.


LO QUE NO VENDE

Eugenia es la esposa de Juan, afectado de tetraplejia desde hace cuatro meses. Desde entonces ha estado al lado de su marido, día y noche, sufriendo con él, pero especialmente apoyándolo, animándolo, cuidándolo, acompañándolo, porque cuando se casaron prometieron ante Dios que estarían juntos en la salud y en la enfermedad, y ella es fiel a la palabra dada. Con una gran fe en Dios sigue caminando y compartiendo la cruz de su marido y dando ánimos a otros enfermos, siempre tiene palabras de aliento en su boca. Rezamos por ellos, para que Dios le devuelva la salud a Juan y os dé las fuerzas necesarias para seguir adelante.


EN ESTA SEMANA

  • 31 de marzo, 20 h. 1er día Triduo Stmo. Cristo Buena Muerte.
  • 1 de abril, 20.00 h. 2º día.
  • 2 de abril, 19.00 h 3er día.
  • 2 de abril, 19,45 h. Vía Crucis.
  • 3 de abril, 12,00 h. Función Principal de Estatuto.
  • Recordar al grupo de catequistas el Encuentro Diocesano de 2011 que se celebrará el día 2 de abril en el Seminario de Jaén.