HOJA PARROQUIAL DE SAN JOSÉ
DE LINARES
ASCENSIÓN DEL SEÑOR C
16-MAYO del 2010
Año -II- Nº 86
EDITORIAL. LA CARA OCULTA DE LA IGLESIA
En un artículo precioso de Luis Mª Ansón, Miembro de la Real Academia de la Lengua española, a raíz de todos los desaguisados y denuncias que se están haciendo contra la Iglesia, él expone su experiencia de lo que ha visto y ha vivido en sus muchos viajes por todo el mundo y dice: “Allí donde hay un hospital dedicado al sida, lo mismo en Asia, en África o en Iberoamérica, o en Europa, son monjas y curas católicos los que están al pie de cama para atender a los enfermos. He recorrido en trabajo profesional más de cien países. En leproserías de todo el mundo, en los asilos de ancianos terminales, en los hospitales para enfermos infecciosos… sólo se encuentra uno con misioneras y misioneros católicos. Esa es la escueta verdad. Nunca me he encontrado en esos lugares con un comunista o un socialista militante, con uno de esos manifestantes que vociferan contra la Iglesia. Los misioneros y misioneras permanecen al margen de las pancartas y de los mítines políticos. Derraman su amor sobre los leprosos, los sidosos, los enfermos terminales, los ancianos sin techo, los desfavorecidos y desamparados. Aún más, todos los profesionales del periodismo sabemos muy bien que, cuando estalla una tragedia, del tipo que sea, en el tercer mundo, encontramos información certera y apoyo en el misionero o misionera españoles que ejercen su ministerio en los lugares más miserables y de riesgo. Nunca fallan. Allí te los encuentras. Y esa es la realidad.”Esta confesión podríamos trasladarla a nuestra misma realidad y observar con objetividad: sin necesidad de marcharnos a otro lugar, lo tenemos en nuestra misma casa. El año pasado atendimos a 120 familias de nuestro barrio, aparte de toda la gente que pasó y le echamos una mano. No se trata de ponernos flores, sino de recordarle a todos los que hablan tanto, que sería mejor que actúen y sean solidarios.
PALABRA DE DIOS
Lectura del libro de los HECHOS DE LOS APÓSTOLES 1,1-11
En mi primer libro, querido Teófilo, escribí de todo lo que Jesús fue haciendo y enseñando hasta el día en que dio instrucciones a los apóstoles, que había escogido, movido por el Espíritu Santo, y ascendió al cielo. Se les presentó después de su pasión, dándoles numerosas pruebas de que estaba vivo, y, apareciéndoseles durante cuarenta días, les habló del reino de Dios.
Una vez que comían juntos, les recomendó: No os alejéis de Jerusalén; aguardad a que se cumpla la promesa de mi Padre, de la que yo os he hablado. Juan bautizó con agua; dentro de pocos días vosotros seréis bautizados con Espíritu Santo. Ellos lo rodearon preguntándole: Señor, ¿es ahora cuando vas a restaurar el reino de Israel? Jesús contestó: No os toca a vosotros conocer los tiempos y las fechas que el Padre ha establecido con su autoridad. Cuando el Espíritu Santo descienda sobre vosotros, recibiréis fuerza para ser mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta los confines del mundo.
Dicho esto, lo vieron levantarse, hasta que una nube se lo quitó de la vista. Mientras miraban fijos al cielo, viéndolo irse, se les presentaron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron: Galileos, ¿qué hacéis ahí plantados mirando al cielo? El mismo Jesús que os ha dejado para subir al cielo volverá como le habéis visto marcharse.
Palabra de Dios
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los EFESIOS 1,17-23
Hermanos:
Que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, os dé espíritu de sabiduría y revelación para conocerlo. ilumine los ojos de vuestro corazón, para que comprendáis cuál es la esperanza a la que os llama, cuál la riqueza de gloria que da en herencia a los santos, y cuál la extraordinaria grandeza de su poder para nosotros, los que creemos, según la eficacia de su fuerza poderosa, que desplegó en Cristo, resucitándolo de entre los muertos y sentándolo a su derecha en el cielo, por encima de todo principado, potestad, fuerza y dominación, y por encima de todo nombre conocido, no sólo en este mundo, sino en el futuro.
Y todo lo puso bajo sus pies, y lo dio a la Iglesia como cabeza, sobre todo. Ella es su cuerpo, plenitud del que lo acaba todo en todos.
Palabra de Dios
Conclusión del santo Evangelio según san LUCAS: 24,46-53
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: Así estaba escrito: el Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos al tercer día y en su nombre se predicará la conversión y el perdón de los pecados a todos los pueblos, comenzando por Jerusalén. Vosotros sois testigos de esto. Yo os enviaré lo que mi Padre ha prometido; vosotros quedaos en la ciudad, hasta que os revistáis de la fuerza de lo alto. Después los sacó hacia Betania y, levantando las manos, los bendijo.
Y mientras los bendecía se separó de ellos, subiendo hacia el cielo. Ellos se postraron ante él y se volvieron a Jerusalén con gran alegría; y estaban siempre en el templo bendiciendo a Dios.
Palabra del Señor
DIÁLOGOS DESDE EL EVANGELIO
N: Mi Señor Jesús: Hoy me vas a permitir que los dos nos deleitemos con este poema de León Felipe, dedicado a tu Ascensión
«Aquí vino y se fue. Vino..., nos marcó una tarea y se fue. Tal vez detrás de aquella nube hay alguien que trabaja, lo mismo que nosotros, y tal vez las estrellas no son más que ventanas encendidas de una fábrica, donde Dios tiene que repartir una labor también. Aquí vino y se fue. Vino..., llenó nuestra caja de caudales con millones de siglos y de siglos; nos dejó unas herramientas..., y se fue. El, que lo sabe todo, sabe que estando solos, sin dioses que nos miren, trabajamos mejor. Detrás de ti no hay nadie. Nadie. Ni un maestro, ni un amo, ni un patrón. Pero tuyo es el tiempo. El tiempo y esa gubia con que Dios comenzó la creación».
+Jesús: Precioso poema, querido amigo. “Aquí vine y me fui”. Y cómo temían mi ausencia mis discípulos. No querían quedarse solos. Tenían miedo y por eso tuve que recordarles que no los iba a dejar, sino que estaría con ellos siempre, siempre, todos los días, hasta el final del mundo. (Mt. 28, 20). Era necesario que yo me fuera para que el Padre les enviara el Espíritu Santo.
N: Pero antes de irte, les confiaste una tarea. Es como dice el poeta: “vino…nos marcó una tarea y se fue”.
+Jesús: y es así. Era preciso continuar el proyecto de salvación que nuestro Padre Dios tiene sobre el mundo; era preciso seguir predicando el Evangelio de salvación a toda la creación. Por eso, al ver lo ensimismados que estaban mis discípulos, mientras yo ascendía camino del Padre, y así seguían aún después de cubrirme la nube, aquellos dos hombres vestidos de blanco les gritaron: “Galileos, ¿qué hacéis ahí mirando al cielo? El mismo Jesús que os ha dejado, volverá como lo habéis visto marcharse."
N: Es verdad, amigo Jesús. Los cristianos no podemos vivir distraídos mirando a las nubes. Estamos en la tierra. Es aquí, en este mundo nuestro, en esta etapa de la historia que nos ha tocado vivir, donde tenemos que “ser tus testigos”. Hay mucho que hacer para llegar a lograr un mundo de hermanos. Para eso les diste a los tuyos y a nosotros, tu bendición, antes de marcharte. Empezaba una nueva creación. Así empezó también la creación primera: cuando Dios creó la primera pareja humana también “los bendijo”.
+Jesús: Bien dicho, amigo. Enmendando un poco el texto de León Felipe, quiero transmitiros la confianza de que no estáis solos:
«Aquí vine y me fui. Os marqué una tarea pero estad seguros. No tengáis miedo. Detrás de aquella nube estoy yo que trabaja, con vosotros y lo mismo que vosotros, y las estrellas no son más que ventanas encendidas de una fábrica, donde Dios tiene que repartir una labor también.
N: Amigo Jesús. Con gran alegría, como tus apóstoles, voy a celebrar la Eucaristía de tu Ascensión y de la nuestra. GRACIAS.
VE Y LO CUENTAS
Hace unos días asistí a la celebración de las bodas de oro de una pareja. Cincuenta años antes, yo, como sacerdote, celebré con ellos la Eucaristía y el Sacramento de su matrimonio del que ellos fueron los ministros. Llevaban ante el Señor, quizás un poco confusos, propio de sus años juveniles, un proyecto de amor, para realizarlo durante toda su existencia, “hasta que la muerte nos separe”, dijeron con la timidez propia del momento.
Pasados cincuenta años, desearon celebrar sus bodas de oro en la misma parroquia y, si era posible, que presidiera la ceremonia el mismo sacerdote. Sus tres hijos se encargaron de la preparación de la fiesta y aprovecharon la ocasión para dar a sus padres alguna sorpresa, entre ellas ocultarle la asistencia del mismo sacerdote que “los casó”. Cuando lo vieron salir con los ornamentos sacerdotales, lo abrazaron rebosantes de gozo. Allí estaban sus hijos, sus nietos, los hermanos de ambos, los sobrinos…toda la familia, celebrando una jornada festiva, llena de paz y de alegría. Buen ejemplo en estos tiempos en que tan fácilmente se rompen los matrimonios. VE Y LO CUENTAS.
LO QUE NO VENDE
El sábado pasado se celebró en la Universidad de Jaén un congreso a nivel de toda Andalucía sobre la VIDA. Un tema interesantísimo y de una importancia capital que hoy se está poniendo en tela de juicio, dando como resultado uno de los mayores atentados en toda la historia contra el ser humano.
Todos los ponentes, que eran de una altura impresionante, coincidían en que se trata de una apuesta por el dinero en contra de la vida y, más en concreto, en contra de la vida humana, problema que, sin lugar a duda, hemos de pagar bien caro en algún momento de la historia.
Todos coincidían también en que es uno de los atentados más grandes que se están haciendo a la dignidad de la mujer, banalizando justamente lo más grande que tiene: el DON de ser MADRE y, en consecuencia, el derecho a la vida. Los promotores del sistema han logrado que sea políticamente incorrecto decir esto y, en cambio, han puesto el asesinato del ser humano como un DERECHO.
EN ESTA SEMANA
Día 20: 17 h.: Primeras confesiones.
Día 20: 8 tarde- Misa de clausura de la Visita Pastoral en el Santuario.
Día 21: 17 h.: Preparación de la Eucaristía del Domingo.
