La Cabria, nº 57

LA CABRIA
HOJA PARROQUIAL DE S. JOSÉ DE LINARES
DOMINGO TREINTA DEL T. ORDINARIO -B-
25 de OCTUBRE DE 2.009
Año II - Nº 57

EDITORIAL
“…Y ella sola se murió”

Circulan en la red de internet infinidad de cosas y, entre todo eso que llega, abrí una carta de un currante de a pie que se quejaba de ver cómo su sueldo queda diezmado por los bocados que le dan y una vez que él pide una ayuda para una beca para su hijo, se la niegan porque, según la administración, su sueldo da también para el estudio de su hijo, y con rabia protesta de ver que con su sueldo, a su vecino le dan la beca para su hijo y además, para que se compre un todo terreno y se tome la cerveza todos los días.
Como consideré que lo que decía este señor era un retrato exacto de lo que está pasando, se lo mando a la lista de mis amigos y mi sorpresa es descomunal ante las respuestas que recibo: “A mi no me mandes esas cosas, pues tú sabes bien que yo soy rojillo y no me gustan los fachas”; otro me contesta desde la otra esquina: “A mi no me mandes más estas cosas, pues estoy harto de politiquerías”
La pregunta que yo me hago en medio de los dos extremos es la siguiente: ¿qué diferencia hay entre uno y otro? Pues los dos han renunciado a pensar, los dos han renunciado a tener una opinión sobre la realidad y, lógicamente, ninguno de los dos quiere definirse, ambos echan la pelota para que la juegue el vecino a quien consideran su contrario: uno porque dice que eso son cosas de los de un extremo y el otro porque dice que es fruto de los del otro extremo. O sea, entre todos la mataron y ella sola se murió.
Ciertamente, un pueblo así es la masa perfecta para modelar lo que se quiera, sabiendo que lo que hagas no va a tener respuesta crítica alguna, pues “los unos por los otros, la casa sin barrer” y de esa manera se imponen leyes “¡porque lo digo yo!” o se hace lo que se me antoja por orden de mis pantalones. ¡¡¡Sí señor, viva la democracia!!!

PALABRA DE DIOS

Lectura del libro del profeta Jeremías 31, 7-9
Así dice el Señor:
«Gritad de alegría por Jacob, regocijaos por el mejor de los pueblos; proclamad, alabad y decid: El Señor ha salvado a su pueblo, al resto de Israel.
Mirad que yo os traeré del país del norte, os congregaré de los confines de la tierra. Entre ellos hay ciegos y cojos, preñadas y paridas: una gran multitud retorna. Se marcharon llorando, los guiaré entre consuelos; los llevaré a torrentes de agua, por un camino llano en que no tropezarán.
Seré un padre para Israel, Efraín será mi primogénito».
Palabra de Dios

Lectura de la carta a los Hebreos 5, 1-6
Hermanos:
Todo sumo sacerdote, escogido entre los hombres, está puesto para representar a los hombres en el culto a Dios: para ofrecer dones y sacrificios por los pecados.
Él puede comprender a los ignorantes y extraviados, ya que él mismo está envuelto en debilidades.
A causa de ellas, tiene que ofrecer sacrificios por sus propios pecados, como por los del pueblo. Nadie puede arrogarse este honor: Dios es quien llama, como en el caso de Aarón. Tampoco Cristo se confirió a sí mismo la dignidad de sumo sacerdote, sino aquel que le dijo: «Tú eres mi Hijo: yo te he engendrado hoy», o, como dice otro pasaje de la Escritura: «Tú eres sacerdote eterno, según el rito de Melquisedec».
Palabra de Dios

Lectura del santo evangelio según San Marcos 10, 46-52
En aquel tiempo, al salir Jesús de Jericó con sus discípulos y bastante gente, el ciego Bartimeo, el hijo de Timeo, estaba sentado al borde del camino, pidiendo limosna. Al oír que era Jesús Nazareno, empezó a gritar: Hijo de David, Jesús, ten compasión de mí.
Muchos lo regañaban para que se callara. Pero él gritaba más: Hijo de David, ten compasión de mí. Jesús se detuvo y dijo: Llamadlo.
Llamaron al ciego, diciéndole:
Ánimo, levántate, que te llama. Soltó el manto, dio un salto y se acercó a Jesús.
Jesús le dijo: ¿Qué quieres que haga por ti?
El ciego le contestó: Maestro, que pueda ver.
Jesús le dijo: Anda, tu fe te ha curado. y al momento recobró la vista y lo seguía por el camino.
Palabra del Señor

DIÁLOGOS DESDE EL EVANGELIO

Curación del viejo Bartimeo
N: Hola, Bartimeo. Me alegra mucho verte con nosotros.

Bartimeo: Y yo estoy loco de contento. Toda mi vida sentado al borde del camino, en la cuneta, con la mano extendida esperando que alguien me diera algo para poder vivir, pero casi toda la gente pasaba de largo. Cuando estás en el mundo de los marginados, no eres ni un número.

N: Llevas toda la razón. Con la cantidad de gente que pasa por el camino y ahí permanecéis olvidados.

Bartimeo: Menos mal que, al oír tanta gente he preguntado qué pasaba y, al decirme que era Jesús de Nazaret, del que ya me habían hablado, empecé a gritar llamándolo: ¡¡¡Jesús, hijo de David, ten compasión de mí!!!.

N: Tú no oías a la gente que te mandaba callar…Y es que los pobres molestan porque son una llamada a nuestra solidaridad y un reproche a la dureza de nuestro corazón.

Bartimeo: Jesús sí que me oyó y mandó que me llamaran. Con una alegría desbordante solté el manto, di un salto y me acerqué a Jesús, que, con toda dulzura, me dijo:

Jesús: ¿Qué quieres que haga por ti?

Bartimeo: Maestro, que pueda ver, le contesté.

Jesús me dijo: Anda, tu fe te ha curado.

Bartimeo: Al momento recobré la vista y aquí me tienes en el camino, en la calzada de la vida, como agente de la historia. No quisiera olvidarme de los muchos que han quedado y están en la cuneta. Quiero más bien comprometerme con ellos.

N: Y cómo te sientes?

Bartimeo: Feliz; muy feliz; intensa e inmensamente feliz. Jesús me ha dado la luz. Y puedo ver el rostro de la gente; ya veo la regia esbeltez de las montañas; el agua juguetona y cristalina de los arroyos, que serpentea por las llanuras y los valles, fecundando generosamente la tierra; las flores de innumerables colores; veo asomarse silenciosa y tímidamente la aurora repartiendo luz, belleza y alegría. Veo la firma que Dios puso en la Alianza con Noé y con toda la naturaleza: el arco iris…¡¡¡VEO EN LA CREACIÓN TANTO DERROCHE DE AMOR¡¡¡ Pero hay algo muy importante, que nos trae Jesús: es la LUZ que ilumina el alma y que es portadora de la vida, de la verdad, del amor, de la entrega, del servicio, de la esperanza. Jesús mismo nos dice:

Jesús: “YO SOY LA LUZ DEL MUNDO” EL QUE CAMINA CONMIGO NO ANDA EN TIIEBLAS”

Bartimeo: …Y así podría seguir…

N: Por favor, Bartimeo, sigue hablando, pues esa luz se nos da para gozarla, ciertamente, pero no para guardarla, sino para difundirla.

Bartimeo: Quizás los que, siendo ciegos, y hemos recibido la posibilidad de ver, tengamos más capacidad de apreciar la luz. Esa LUZ, con mayúscula; que nos permite ver a Dios en la creación. La montaña encierra en su cumbre el misterio; las flores son como sonrisas de Dios; el mar, la inmensidad; el gorjeo de los pájaros son como las nanas que nos canta el Dios Padre-Madre...Y así podríamos seguir, sin olvidar lo que nos dice Jesús: VOSOTROS SOIS LA LUZ DEL MUNDO.

N: No apaguemos nunca esa LUZ.

VE Y LO CUENTAS

“En mi casa me tenían por un desquiciado y desde niño siempre noté que estorbaba, pues cada vez que se dirigían a mi era a voces y con insultos… Recuerdo que a la catequista le dijo mi madre que yo era insoportable pero ella no le hizo caso y yo notaba que aquella mujer me quería de verdad. Siempre la recuerdo y los consejos que me dio son los que yo doy a mi hijo que hoy tiene la edad que tenía yo cuando estaba en la catequesis. Para mi, esa mujer es más que mi madre”.
Es el testimonio de alguien que confiesa que la única palabra positiva que escuchó durante su infancia fue la que le dijo su catequista.
Escuchar esto recompensa ya todo el esfuerzo que podemos hacer en la vida y los malos ratos que nos damos cuando vemos que nadie apoya lo que hacemos, pero no podemos olvidar que Dios sigue cuidando esa semilla que con tanto cariño sembramos en su nombre en el corazón de un niño.

LO QUE NO VENDE

Efectivamente, hoy no vende mantener una postura equilibrada, de sentido común, pues se la considera conservadora, retrógrada y, como encima pueda suponer una crítica a lo que hay establecido, es mejor que antes de abrir la boca mires bien la gente que te rodea y te puede escuchar. La verdad es que es lamentable que hayamos llegado a esta situación.

EN ESTA SEMANA

Venimos diciendo que nos faltan catequistas, pero nadie se anima a dar un testimonio de su fe a unos niños que se preguntan ¿por qué reza la gente y a quién le reza?
Todos nos quejamos de cómo están las cosas, todos decimos lo que se debe hacer, todos tenemos la solución para arreglar los problemas… pero las soluciones se pueden quedar en los libros o en nuestras cabezas, no sirven de nada si es que no se las pone en práctica. Nuestros niños de hoy son los jóvenes de mañana y los adultos de pasado mañana. ¿Tendrán algo grande por qué recordarnos?


FELIZ SEMANA

Hoy quiero felicitar a nuestra comunidad parroquial, pues el domingo pasado, día del DOMUND, expresamos nuestro amor a la iglesia y a su labor misionera llevada a cabo en todo el mundo uniéndonos con un gesto de solidaridad real: una colaboración de 1010 €, con nuestro granito de arena vamos haciendo posible que la iglesia siga anunciando el reino de Jesús.